miércoles, 26 de abril de 2017

Las narrativas mediáticas a modo de internalizar el fenómeno de la educación 2.0


Las narrativas mediáticas a modo de internalizar el fenómeno de la educación 2.0


Fotografía: Coyhaique, Chile.
Gumercindo Pinto Devia

Las diversas formas de  Cultura, medioambiente y educación que interactúan en América Latina, representan el soporte histórico de cada pueblo en su forma de ver la realidad y de aprender,  en cada acto social de las comunidades y en los procesos de iniciación de los adolescentes, en  armonía con la naturaleza donde las familias proyectaron  el aprendizaje ancestral a las nuevas generaciones, centrado en la identidad, política social y de transferencia cultural, la cual se evidenció  y que diferenció a los pueblos: en lenguas, comunicación, costumbres, religión, economía, entre otros. Hoy con todas las implicancias los pueblos están asimilando estos innovadores  escenarios que transitan desde la modernidad hacia el posmodernismo.

 Este vector cultural emergente  introduce la desterritorialidad con el uso de las TICs., construyendo el poder desde la cultura, con sistemas políticos vinculados al  eurocentrismo, centrado en  la economía, teniendo en el instrumento educación, el cuerpo legal para construir el saber desde  las diferencias. Según el destacado académico Carlos Ossa,  las narrativas mediáticas son el soporte, la voz oficial del Estado, de los grupos de poder oligárquicos, sean políticos, religiosos[1], militares, económicos, con la finalidad de  modelar las conciencias y obtener los dividendos de la gran masa, como clase postergada y ávida de necesidades, en este caso de educación, que se expresa en el consumismo del sujeto posmoderno en beneficio de los mercados económicos.

Las narrativas mediáticas  poseen un papel relevante en tres configuraciones contemporáneas, como son los sujetos, los territorios y los relatos. Los primeros forman el cuerpo social y la nación; el segundo, son los escenarios o espacios físicos (y virtuales) donde se desarrolla la vida y el intercambio social; el último, son actos comunicativos, que expresan conceptos o pensamientos de carácter privado y público, que articulan las prácticas sociales (educación 2.0), conteniendo la hegemonía, margen y la diferencia, del sujeto moderno en definición[2], en una modernidad que genera alteridades e hibridación.

A modo de fundamento las variables que interactúan en los procesos  educativos virtuales, debemos referirnos de alguna forma a la hibridación social, que implica  nuevas estructuras y  prácticas[3], es precisamente una transformación,  compartir  identidades individuales con deseos, derechos y necesidades materiales de supervivencia en conglomerados de modelos sectorizados que se articulan según su participación en el mercado y en el trabajo determina el éxito y la propagación de los mass media en el seno de la economía que orienta su vinculo con todas las clases sociales, buscando la reconversión de un patrimonio en nuevas formas de producción y mercado[4]. Los medios masivos, coaptados por la televisión (local, cable y  satelital), son poderosos promotores de la cultura-mundo[5] que se realiza en la actualidad en la percepción de los jóvenes, esta se traduce en forma emergente en la cultura de la desterritorialidad y de identidades florecientes generadas por la transculturización, de tal modo cobra relevancia los espacios evanescentes de las comunidades virtuales, donde el hipertexto[6], las TICE y el metalenguaje, nos otorgan otras formas  de comunicarnos y de relacionarnos, de los hogares electrónicos y de sociedad de flujos de Castell, la ciudad virtual de Álvaro Cuadra, son una realidad que crece en nuestros países subdesarrollados con nuevas generaciones de sujetos modernos que piensan desde la cultura digital, con des-orden  en administración de la información y con mayor razón producir conocimiento, en comunidades de aprendizaje virtual, donde se concilia la interacción entre los estudiantes desde la teoría, cultura organizacional,  práctica y experiencia profesional que ocurre en un espacio geográfico o territorialidad determinada.[7]

Mattelart plantea la noción del imperialismo cultural[8], como una empresa multinacional, que se instala en organismos internacionales como la UNESCO, sumado al control monopólico  de los flujos de información de las empresas transnacionales de la comunicación y la cultura, idéntico caso es la planificación del  Estado en la implantación de políticas y acción estratégica en ámbito de la comunicación social, educación y la ejecución de eventos culturales, a través de la estructura administrativa territorial. En este sentido es relevante como los  países del cono sur  presentan  nuestras culturales y las universidades realizan procesos educativos en las ciudades fronterizas, como es el caso de Perú, Bolivia, Chile y Argentina, similar caso con la TV abierta, señales de TV cable y las radioemisoras AM que cubren grandes extensiones de territorio y audiencia en los países mencionados. Una reflexión  importante es el ciberespacio, los sitios web educativos de universidades estatales y privadas, culturales, música,  la emergente cultura virtual de youtube del mundo del vídeo doméstico, redes sociales como Facebook, Twitter, WhatsApp, Skype en educación,  blogs que ofrecen nuevas formas de comunicación hipertextual, la creación de lenguajes propios, la modificación de las costumbres con  cibernautas nocturnos, produciendo otras formas de comunicación mediada,  convocatorias (reformas al sistema educativo) compartiendo vivencias, valores y conocimientos, reduciendo las carencias que la sociedad estructurada no otorga en espacios de reflexión y  aceptación.

La sociedad, etnografía virtual, comunicación mediada por computador, CMC, planteamientos de Christine Hine[9] y la educación son consustanciales en todo  proceso modernizador,  el discurso debe estar focalizado en cómo se genera el conocimiento,  cómo los estudiantes aprenden el saber, el saber hacer y el saber ser en la subjetividad del hombre moderno y de los hombres subalternos, actualmente la discusión  es metodológica, no es epistemológica.

La lógica moderna es simbólica, permite el continuismo político, económico, educacional, el discurso mediático y  el consumo, entonces la modernidad es racionalizada, es el deseo, es seducción en la educación  usando el paradigma de conciliar tiempo, trabajo y espacio.  En el mismo sentido, el postmodernismo explicita nuevos escenarios hacia nuevos relatos, experincias en la buscada de las verdades que se manifistan
en el día a día en la educación,  aula y en la sociedad en decadencia política.


[1] En occidente se abandona la religión para realizar la modernidad, en cambio, en el mundo musulmán se hace con la religión.
[2] Castro-Gómez, Santiago, “Ciencias Sociales, Violencia epistémico y el problema de la Invención del otro”, en Langer, Edgardo (comp.) la colonialidad del saber: Eurocentrismo y Ciencias Sociales. Perspectivas Latinoamericanas, Buenos Aires, Argentina, Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales, CLACSO, 1993,pp.145-161. En  Doctorado en Cultura y Educación en América Latina, Santiago de Chile, Universidad ARCIS, pp 23.
[3] Garcia Canclini,  Nestor, Noticias Recientes Sobre la Hibridación”, en Revista Transcultural de Música, México, D.F., 2003, extraído de www.sibetrans.com/trans/trans7/canclini..htm. En. Doctorado en Cultura y Educación en América Latina, Santiago de Chile, Universidad ARCIS. “Las narrativas mediáticas como nuevo vector cultural latinoamericano”.  pp 95.

[4] Ibid, pp, 97
[5] Martín-Barbero, Jesús, “Televisión: Entre lo Local y lo Global “ Textos de las I Jornadas sobre televisión, España, diciembre, 1999. Extraído de www.uc3m.es/inst/MU/Barbero1.htm. En Doctorado en Cultura y Educación en América Latina, Santiago de Chile, Universidad ARCIS. “Las narrativas mediáticas como nuevo vector cultural latinoamericano”.  pp 234.
[6] Ibid, pp, 236.
[7] Pinto Devia, Gumercindo. Maestría en educación superior e-learning, Universidad Mayor de San Andrés. Bolivia, pp. 87.
[8] Santa Cruz A., Eduardo, “Estudios de comunicación en América Latina y Chile: Acerca de causas y azares”, Santiago de Chile, Universidad ARCIS, 1992, 31 p. En Doctorado en Cultura y Educación en América Latina, Santiago de Chile, Universidad ARCIS. “Las narrativas mediáticas como nuevo vector cultural latinoamericano”.  pp 127.

[9] Dr. Christine Hine, Universidad de Surrey. Inglaterra. http://www.surrey.ac.uk/sociology/people/christine_hine/  11 noviembre 2012.




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